En el piedemonte más oriental de la Sierra de Javalambre se sitúa Abejuela, el pueblo más meridional de Teruel, ya en el límite con las provincias de Valencia y Castellón.
El municipio está situado junto a la rambla de Abejuela, tributaria del Turia. Las sierras calcáreas que rodean la población presentan sus cumbres aplanadas por superficies erosivas a alturas entre 1.400-1.600 m, salpicadas de pinos, sabinas y enebros.
En su término domina la sabina albar (Juniperus thurifera), junto a esta especie se localizan pinares de laricio y mixtos y encinares como los de la rambla de Abejuela, al oeste del núcleo de población, y los de la rambla de Andilla.
El nuevo núcleo de población se organizó a lo largo de la calle principal, a los pies de la ladera donde se distribuye el caserío. En un extremo del pueblo, sobre un barranco, se alzó una robusta torre de defensa, actualmente utilizada como vivienda, datable en los siglos XIII o XIV.
La iglesia de San Agustín se encuentra situada en la plaza que se abre en la calle principal. Sobre el caserío se construyó una amplia cisterna, cubierta mediante una bóveda rebajada de sillería sin labrar. En las afueras del lugar se encuentra la ermita de Santa Margarita, buena muestra de la pervivencia de los modelos medievales en el marco rural.